Es un gozo grande, muy grande, poder daros a conocer la gran noticia, esperada y trabajada por diferentes realidades eclesiales y animada por el entusiasta “grupo promotor Ubuntu” durante más de dos largos años de gestación orante y discernimiento permanente, de la decisión del Consejo Episcopal de Madrid de constituir formalmente la “Comisión Diocesana por la Comunión Eclesial”, que el Cardenal Arzobispo con su Consejo Episcopal, a propuesta de la Vicaria de Pastoral Social e Innovación, ha aprobado unánimemente.
Todo ha sido gracia a la acción constante y el espíritu abierto del Vicario Episcopal de Innovación José Luis Segovia, y la profundidad de la mirada de nuestro cardenal D. Carlos Osoro, que es el verdadero protagonista, junto al Señor, del don de la comunión, hacen posible hoy la puesta en marcha de esta pequeña herramienta eclesial, con el fin de promover en la Archidiócesis de Madrid el anhelo de la Espiritualidad de la Comunión.
Damos gracias a Dios por permitirnos ver este amanecer de plena esperanza y a cuantos habéis empujado esta “Historia de historias”, de un modo humilde y valiente, sin el protagonismo especial de nadie, aunque con el empuje humilde, carismático y profético de Vicente Morales (Brotes de Olivo / Comunidad Pueblo de Dios).
El miércoles 25 de octubre de 2017 (el mismo día que D. Carlos cumple 3 años en que tomó posesión de la diócesis de Madrid) en la sede del arzobispado de Madrid se ha constituido de forma oficial la tan anhelada comisión, formada en la actualidad por un grupo plural de 14 miembros elegidos por el cardenal y bajo el amparo y fuerza de la oración permanente de la vida contemplativa.
No es un órgano de representación de nada ni de nadie, sino vehículo de activación y contagio de la comunión a través de personas de muy diversas sensibilidades eclesiales, pero movidas por un mismo anhelo: Servir para Unir. Su reto es explorar, cultivar, recomponer, ampliar, priorizar y visibilizar la Iglesia como la “Casa y la Escuela de la Comunión” (NMI 43), en todos los niveles y ámbitos del entramado de la vida diocesana, y hacerlo “Entre Todos, con todos y para todos” como nos indica el lema del Plan Diocesano de Evangelización.
Todo está en las manos de Dios. Y el poder de la fe de los pequeños y de toda su Iglesia hacen realidad que la búsqueda de Comunión pase a ser un objetivo de la vida pastoral de la Iglesia de Madrid.
Esta es una iniciativa única y singular (no existe un espacio parecido en ninguna Iglesia española) que puede ser referencia y anime a otras diócesis a dar pasos en esta línea de apostar por lo esencial, la Comunión en la Misión, que puede ser el gran acicate para que todo se renueve en unidad y concordia, en la conversión y la reconciliación de todos. De ahí su urgente y enorme trascendencia.
Es un servicio de profecía amorosa y Comunión (delicado y complejo) que exige “carretones de humildad” y mucha lucidez y escucha al Espíritu. ORAD por favor, para que sea lo que Dios quiera y como Él quiera.
Espero que a todos, después de leer la información que os adjunto, os llene de alegría este paso histórico, que en una parte importante ha sido trabajado por todos y cada uno de vosotros de forma directa, o mediante la aportación de vuestro apoyo, vuestro aliento y vuestra oración constante, durante tanto tiempo y más en concreto en estos dos últimos años.
Damos gracias a Dios y lo ponemos todo en sus manos para que sea lo que Él quiera y como Él quiera. El siguiente paso como todo es obra del Espíritu. Que nos dejemos hacer.
Contamos con vosotros.
Antonio García Rubio (Coordinador de la Comisión Diocesana por la Comunión)