Directrices para los trabajos de la Asamblea de 2024
Al finalizar su reunión del 5 de diciembre, los miembros del Consejo Ordinario del Sínodo de los Obispos adoptaron un Documento para los trabajos que realizará la Iglesia Católica hasta la celebración de la Segunda Sesión de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos (octubre de 2024).
Se trata de orientaciones con una hoja de ruta concreta en la que la profundización de la sinodalidad en una perspectiva misionera y la ampliación de las experiencias de sinodalidad a nivel local son los pilares sobre los que las comunidades locales están llamadas a reflexionar, a partir del Informe de Síntesis adoptado al final. de la Primera Sesión de la XVI Asamblea el 28 de octubre. Como recordó el Santo Padre al aprobar estas directrices de trabajo, “el Sínodo trata de sinodalidad y no de tal o cual tema… Lo importante es cómo se hace la reflexión, es decir, de manera sinodal”.
«A partir de la experiencia de la asamblea del pasado mes de octubre, y especialmente del Informe de síntesis aprobado por los miembros, el Consejo Ordinario decidió un camino unificado pero diferenciado en función de las competencias y posibilidades dentro de las realidades eclesiales locales», afirma el cardenal Mario Grech , secretario general. del Sínodo, añadiendo que «este es ya un modo sinodal de trabajar en la Iglesia, donde cada uno coopera para el bien de todos según su vocación».
De hecho, teniendo presentes los dos temas o orientaciones principales, se pregunta a las diócesis :
1) en cuanto a la profundización : promover una reflexión que centre el tema de la corresponsabilidad diferenciada en la misión de todos los miembros del Pueblo de Dios (cf. Informe de Síntesis , capítulos 8-12, 16 y 18). Se pide a las Iglesias locales que lleven a cabo una consulta adicional, involucrando a personas y grupos (párrocos, órganos de participación, equipos sinodales, etc.) que expresan una variedad de experiencias, capacidades, carismas, ministerios dentro del Pueblo de Dios y cuyo punto de Este punto de vista es de particular ayuda para centrarse en » cómo » crecer como Iglesia sinodal. En este sentido, parece indispensable la participación de expertos e instituciones académicas presentes en el área, para que pueda estar presente la contribución de los conocimientos teológicos y canónicos, así como de las ciencias humanas y sociales pertinentes ;
2) en cuanto a la ampliación de las experiencias de sinodalidad : continuar o promover nuevas iniciativas para crecer como iglesia sinodal en misión, con experiencias de formación y de escucha que involucren también a quienes hasta ahora no han sido tocados por el proceso, a los grupos que viven en condiciones de pobreza y marginalidad social, así como cristianos de diferentes denominaciones y personas de otras religiones; recoger y transmitir testimonios y buenas prácticas para ser enviados a la Secretaría del Sínodo a través de las Conferencias Episcopales o de las Estructuras Jerárquicas Orientales.
Para facilitar el trabajo de las comunidades locales, la Secretaría General ha preparado una posible hoja de trabajo para ayudar a recoger los frutos de la asamblea sinodal de octubre y a continuar el camino sinodal de conversión en las Iglesias locales. La hoja está disponible en synod.va .
Se pide a las Conferencias Episcopales y a las Estructuras Jerárquicas Orientales que acompañen el trabajo de las Iglesias locales ofreciéndoles indicaciones sobre los modos y tiempos de estudio y trabajo en profundidad; promover también su reflexión sobre la corresponsabilidad diferenciada en materia de misión, especialmente a nivel de las agrupaciones de Iglesias (regionales, nacionales, internacionales) y en las relaciones entre las Iglesias y el Obispo de Roma; elaborar la síntesis de las contribuciones del estudio en profundidad recibido de las Iglesias locales y/o producido a nivel nacional, y enviarlas, junto con las mejores prácticas recogidas por las Iglesias locales, a la Secretaría General del Sínodo antes del 15 de mayo.
Al mismo tiempo, la Secretaría General del Sínodo promoverá y coordinará la reflexión sobre algunas cuestiones «importantes» del Informe de Síntesis que deben ser abordadas a nivel de toda la Iglesia y en colaboración con los Dicasterios de la Curia Romana. En la forma propia de las Asambleas sinodales, se presentará al Santo Padre una lista de temas. Grupos de expertos de todos los continentes, con la participación de los dicasterios pertinentes de la Curia Romana, serán convocados para trabajar de manera sinodal sobre los temas que el Papa Francisco indique. Se presentará un informe sobre el progreso de este trabajo en la Segunda Sesión en octubre de 2024.
En todo este trabajo, los miembros y todos los participantes de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, nombrados por el Santo Padre, tendrán la importante tarea de ser embajadores del camino recorrido y estarán llamados a ser los verdaderos puntos de referencia para sus respectivas realidades eclesiales.